Tabla de contenido
- ¿Qué dicen las estadísticas?
- 1. Compra productos de temporada
- 2. Evita la comida rápida
- 3. Evita el desperdicio de alimentos
- 4. Aprovecha descuentos y ofertas
- 5. Haz un presupuesto
- 6. No compres por impulso – haz una lista de compras
- 7. Elige marcas económicas
- 8. Compra en supermercados grandes
- 9. Congela todo lo que se pueda congelar
- 10. Haz un menú semanal
En este artículo encontrarás:
Estadísticas sobre el gasto promedio en España en comida.
Cómo planificar la compra para gastar menos.
Cómo ahorrar dinero con los alimentos que ya tienes.
¿Qué dicen las estadísticas?
Los hogares en España gastan en promedio alrededor del 20% de todos sus gastos en alimentos y bebidas. Se han realizado varios estudios para ver cuánto gasta el español promedio al mes en alimentos, y los resultados suelen oscilar entre 250 y 350 euros por mes.
Las familias compuestas por dos adultos y dos niños suelen gastar más de 600 euros en alimentos cada mes. Añade a esto los gastos de dietas especiales y costosas para diversas alergias e intolerancias.
No hace falta decirlo, gastamos mucho dinero en alimentos.
Pero no tiene por qué ser un gasto tan grande como muchos creen. Con la estrategia y la planificación adecuadas, puedes ahorrar varios cientos de euros al mes.
¡Es hora de romper con los viejos hábitos y empezar a ahorrar dinero, sin comprometer ni tu paladar ni tu comodidad!
1. Compra productos de temporada
Compra frutas y verduras que estén "en temporada". Compara el precio de las fresas durante los meses de verano con el invierno y te llevarás una sorpresa.
En resumen, es más barato comprar frutas y verduras cuando están en temporada. Cuando la oferta de productos aumenta, el precio también disminuye.
Por ejemplo, el repollo, la cebolla y las coles de Bruselas suelen ser más baratos durante el invierno. En verano, los albaricoques, las peras y los melones son más baratos.
2. Evita la comida rápida
Cocinar es más barato que comprar comida preparada. Comprar salsas preparadas, sopas, y comida congelada es muy conveniente, pero para nada económico.
Al preparar salsas, sopas, croquetas y guisos con ingredientes propios, puedes ahorrar muchas euros por comida. Ni hablar si evitas comprar empanadas, pizzas y ensaladas preparadas.
Si no te gusta cocinar, te recomendamos guisos y sopas. Hay miles de recetas deliciosas y saludables donde básicamente solo necesitas agregar los ingredientes a la olla y dejarlos cocinar. ¡Muy fácil y barato!
Incluso si eres un estudiante con un presupuesto ajustado, no necesitas sobrevivir solo a base de fideos y frijoles. Hay toneladas de recetas que son baratas, saludables y fáciles de hacer. Solo échate una mirada por Instagram o TikTok, hay incontables cuentas que se dedican a desarrollar recetas sencillas, deliciosas y por un par de euros nada más.
Hazle un favor a tu billetera y comienza a cocinar por ti mismo.
3. Evita el desperdicio de alimentos
Según la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), cada hogar en España tira aproximadamente 25 kg de alimentos por año y por persona. Diversos estudios indican que esta cifra puede ser incluso mayor.
Independientemente de quién tenga razón, el hecho es: ¡tiramos demasiada comida! No solo es malo para el medio ambiente, sino que también es desastroso para la billetera.
Un desperdicio de 15 kilos equivale a entre 30 y 35 comidas. Imagínate cuántas comidas tiras a la basura cada año.
Para evitar el desperdicio de alimentos, puedes comenzar a congelar más comida, guardar las sobras y llevar comida en envases reutilizables al trabajo.
4. Aprovecha descuentos y ofertas
Mercadona, Carrefour y Alcampo siempre tienen descuentos en varios productos y segmentos, ¡aprovéchalos!
Ahorrar diez euros en un trozo de carne puede parecer trivial, pero si compras regularmente con descuento, la cantidad que ahorras cada año puede ser significativa.
No tires los folletos publicitarios de los supermercados, ¡a veces puedes encontrar verdaderas gangas!
5. Haz un presupuesto
Hacer un presupuesto es fundamental cuando se trata de todo lo relacionado con el dinero.
Para poder ahorrar dinero y optimizar tus finanzas, es importante saber cuánto y dónde gastas tu dinero.
Comienza calculando cuánto dinero gastas en alimentos. Junta los tickets de los últimos 3 meses, eso te dará una idea más correcta del dinero que gastas en promedio. Lo más probable es que gastes más de lo que crees. Luego crea un presupuesto de alimentos que sigas al pie de la letra.
Aquí puedes leer sobre cómo elaborar un presupuesto como un profesional.
6. No compres por impulso – haz una lista de compras
Estás en la caja y hay una larga fila. El estómago ruge y estás aburrido. A la derecha de las cajas hay helado, refrescos y chuches. A la izquierda de la caja hay chocolate, y patatas fritas. El tiempo pasa, esperas en la fila y el estómago empieza a gritar por comida.
En esa situación, es casi imposible no meter un chocolate o un paquete de chicles en el carrito. Estos productos, por supuesto, están estratégicamente ubicados para que los compres por impulso.
Las compras impulsivas suelen resultar en una billetera más ligera y un malestar de conciencia.
Por eso debes:
Nunca comprar cuando tienes hambre
Nunca comprar cuando tienes sed
Siempre llevar una lista de compras y no comprar cosas que no hayas escrito
7. Elige marcas económicas
Las marcas propias de los supermercados suelen ser mucho más baratas que otras marcas. Esto es especialmente cierto cuando compras productos básicos como arroz.
En muchos casos, no hay absolutamente nada malo, ni diferencias, entre las marcas más baratas y las marcas premium.
En la mayoría de los casos, no hay razón para elegir una marca más cara. Normalmente basamos esa decisión en la creencia de que es mejor solo porque el precio es más alto.
8. Compra en supermercados grandes
Los supermercados grandes suelen tener precios más bajos que las pequeñas tiendas de comestibles. Incluso si pertenecen a la misma cadena, los productos pueden ser más baratos en la tienda más grande.
Esto se debe principalmente a que las tiendas más grandes compran mayores cantidades de productos, lo que les permite obtener un mejor precio de compra y, por lo tanto, pueden poner precios más bajos.
Es fácil caer en la tentación de ir a la tienda de la esquina para comprar leche y pan en lugar de ir al supermercado más grande un poco más lejos. Cómodo, pero no económico.
Ve a los supermercados más grandes, especialmente cuando vas a hacer la compra grande. ¡Tu billetera te lo agradecerá!
9. Congela todo lo que se pueda congelar
Pan, verduras, carne y salsas, hay pocas cosas que no se puedan congelar.
Los productos congelados duran mucho más que los que se guardan en el refrigerador. Por ejemplo, la carne picada puede durar de 2 a 3 meses y las verduras hasta 12 meses. ¿Cuántos días duran esos productos en el refrigerador antes de que tengas que tirarlos? No muchos.
Planifica tus comidas y congela todo lo que puedas para evitar el desperdicio de alimentos.
10. Haz un menú semanal
Para cerrar el círculo y llevar el barco a buen puerto, el último consejo es hacer un plan de comidas para toda la semana. Si este consejo te suena familiar, puede ser porque lo recuerdas de nuestro artículo sobre cómo ahorrar dinero en la vida diaria. Es un truco muy efectivo para reducir los costos de alimentos.
Al hacer un plan de comidas para la semana, sabes:
Exactamente qué necesitas comprar
Aproximadamente cuánto costarán los alimentos de la semana
Qué debe entrar y salir del congelador
Con un menú semanal, puedes seguir más fácilmente tu presupuesto de alimentos y tu lista de compras se escribe casi sola. Todo se vuelve mucho más fácil cuando hay un plan y sabes qué hacer y comprar. También reduce el riesgo de compras impulsivas y desperdicio de alimentos.
Emil utiliza su experiencia para marcar una diferencia en el sector financiero. Estudió en la Universidad de Dinamarca del Sur y ha sido gerente general de Intelligent Banker desde 2013, donde ha ayudado a más de 500.000 usuarios de todo el mundo con sus necesidades financieras.